11B


11B. Hace dos días que lo único en lo que puedo pensar es en ese número y esa letra. Aparecen en mis sueños, en mis pensamientos y, de alguna extraña manera, en mis recuerdos. Grandes caracteres negros sobre un fondo blanco. Intento concentrarme en el origen de ese pensamiento y no lo consigo. Me descubro a lo largo del día preguntándome una y otra vez ¿Dónde? ¿Cuándo? ¿Qué? Pero nunca obtengo respuesta. Hasta ahora. Me encuentro en un polígono industrial apartado de la mano de Dios con mi compañero Ricardo (Richard para los amigos), estamos en la furgoneta de reparto esperando un pedido, sin hablar, el silencio solo interrumpido por la monotonía de la radio y justo frente a nosotros puedo ver el enorme cartel blanco con caracteres negros: 11B. Estoy embobado mirándolo, sin entender cómo demonios es posible que haya estado pensando justamente en ese número durante dos días, cuando Ricardo me pega un tiro en la sien.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Me ha costado

Arena.

Carta al cielo.